martes, 30 de diciembre de 2008

No pudieron arrodillarlo

 

el uranio empobrecido, por años lloviendo sobre el pueblo

las Naciones Unidas robando la comida pagada con petróleo

las mentiras de destrucción masiva

el bombardeo de Bagdad

las botas gringas borrando las huellas de los sumerios en los museos

los traidores trabajando para los invasores

los soldados arrancando a Faluya de raíz

los mercenarios israelíes, sudafricanos. .. en fin, gringos

los invasores ingleses, italianos, y de otros países del "eje del bien"

las bases militares extranjeras, como tumores capitalistas

los tecnócratas venezolanos asesorando el robo del petróleo iraquí

el terrorismo de la guerra contra el terrorismo, moderna piedra de la locura

los perros y las carceleras gringas de Abu Graib

un millón de asesinados, miles de torturados, mutilados, violados

el presidente gringo diciendo que todo aquello fue por fallas de "inteligencia"

y que en todo ese trabajo de matar y saquear aún "queda mucho por hacer"

 

"Este es tu beso de despedida"

le gritó el hombre al perro de Abu Graib

y lo borró con las suelas de sus zapatos

el mundo vio que su pueblo estaba descalzo, pero de pie.


Simón Rodríguez Porras

Venezuela

1 comentario:

Anónimo dijo...

IMpecable ese final. Impecable.
Saludos.